
Hábitat y calidad
De las conversaciones que Bogotá Cómo Vamos ha tenido para el Informe Anual de Calidad de Vida destaco el acceso a vivienda a la luz del desarrollo urbano sostenible, la Nueva Agenda Urbana y el derecho a la ciudad. Una ciudad que se desarrolla sosteniblemente cumple con sus funciones sociales como acceso equitativo y asequible a una vivienda con servicios básicos. ¿Cómo avanza Bogotá en las metas para el cuatrienio?
Para superar el déficit cuantitativo y cualitativo el distrito propuso 50.000 Viviendas de Interés Social (VIS) donde, mínimo, el 20% fuera Vivienda de Interés Prioritario (VIP). Esta meta es ambiciosa y no presenta avances significativos: entre 2020 y 2021 se iniciaron 8.728; siendo el último año el registro más bajo desde el 2004, con tan solo 3.333 VIS y 163 VIP. Ahora, en cuanto al déficit cualitativo, que hace relación de los atributos y la calidad de la vivienda, el hacinamiento es uno de los problemas predominantes y no se encuentran programas que lo trabajen directamente.
Son varios los retos que enfrenta la ciudad en materia de vivienda. Por un lado, la red de expertos con los que trabaja Bogotá Cómo Vamos considera que el principal desafío está en el diseño de incentivos para la construcción de este tipo de viviendas tan necesarias para la ciudad. A lo anterior, se suma las apuestas que el nuevo POT ha hecho en cuanto a las cargas urbanísticas; el efecto de no tener la oferta de vivienda en la ciudad se va a ver nuevamente en las periferias o en los municipios vecinos, profundizando las brechas de los que tienen acceso a vivienda y los que no.
Por: Felipe Mariño, director de Bogotá Cómo Vamos
Columna publicada en Diario ADN, 17 de junio de 2022